EL AMOR DESDE LA A HASTA LA Z
Al atardeceder atraqué alegremente a Azucena
Bonita brasileña, besaba bárbaro, bailaba bossanova (bebía bastante Bols)
Cara contra cara, corazón con corazón, caí (cómo cataba cerveza, caña, Criadores)
Chispas, chupaba chicha, champaña, chiflaba choros
Diosa, dulce, dabas dicha duradera, divina damisela
Ella era elegante, exótica, estaba enamorado (ebria, escaviaba éter, etc.)
Finalmente, firmé formularios follados filantrópicamente, finiquité fortunas, fui forro.
Grandiosa, gentil garota. Generoso, gasté guita graciosamente (gil!)
Herido, hechizado, hablaba hasta hartar, hacía hermosos himnos, habaneras
Imagínense, iba inventando insignificantes ideas, ignoraba idilios importantes (imbécil)
Jocosamente juramos jubilarnos juntos (¡Já, jamás!)
Kamasutras, karmas, Kafka, Kant
Leía libros largos, lujuriosos, levemente lascivos, labraba laberínticas locuras
Me mantenía muy melancólico, mientras mi médico me medicaba mucho Migral
No nací necio, ni normal, ni nabo (naturalmente narcotizado, negligente, neurótico nomás)
¡¡Ñoñerías, ñato!!
Otro Oporto ordenaba. Obedecí (obligaba otra oscura oportunidad)
Pero para pagar pedí plata prestada (paciencia perejil!). ¡Palmé!
Qué querés, quería quimeras quinceañeras, quedé quebrantado
Rabioso, rajé raudamente, repetí rutinas románticas risueñas, rebeldes
Sutilmente supe su saga, sus silenciosas salidas (soy sumamente salame)
También, tenía tanta trayectoria (tomaba Termidor, tequila, tupungato, terminaba todo, tambaleaba)
Una última, unánime untuosidad (ufanábase ultrajante):
Veinticinco vejetes, veinte vagos, varios vecinos voltié (vaya vampiresa vanidosa)
Walter, Waldo, Wilson,
Xavier, Xenón,
¡Yiro!, ¡Yegua!, yo ya
Zafé.